miércoles, agosto 17, 2005

Para ti

Te vi caminando por Lavalle una tardecita de sol. Tu pancho con papas pay me tentó. Y yo sólo te dije “Eh, chica, me das un trozo de tu salchicha?!”. Tú ni siquiera miraste. Todo en ti fue indiferencia. Y yo, cabizbajo, saqué boleto para el Electric.
Al kiosco de revistas me dirigí. La nueva Semanario estaba allí. La pedí. El kiosquero me dijo que era la última, y estaba reservada. Uy, qué cagada!. Pensé en ti.
Luego pasó el cocacolero. EH! Cocacolero! Y me dejó una coca chiquita de un peso sin pajita, que bebí hasta el final. Eructé, miré el envase vacío, y pensé en ti.
Entré al cine. Me senté en la última butaca. Estaban dando una de Bruce Willis, la ultima tal vez. No importa, son todas iguales, concluí. Y no pude evitarlo. Pensé en ti.
Bruce Willis se cargaba a todos los malos, con su pistola o a las piñas. Caras sangrantes, caras sudadas. Finalmente ganó el héroe y se quedó con la chica. Y pensé nuevamente en ti (si, otra vez en ti).
Salí a buscarte!! Me recorrí todo Lavalle!! Esquivé al panchero, al cocacolero, y a las estatuas vivientes atropellé de puro guapo. Llegué a final de la peatonal, doblé esa esquina infernal y allí te encontré, pero para qué?. Estabas sola y con las manos vacías, restos de salchicha colgaban de tus encías. Pero ya sin tu pancho, sin tus papas pay, no eras la misma. Ya no pienso en ti. Nunca más en ti.

No hay comentarios.: